Tarta de queso y frutos rojos sin horno

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Tarta de queso y frutos rojos sin horno

Esta deliciosa tarta de queso y frutos rojos es perfecta para sorprender a tus invitados o para darte un capricho dulce sin tener que encender el horno. Además, su presentación con los frutos rojos por encima la hace muy vistosa y apetecible. ¡Vamos a ver cómo se hace!

Ingredientes:

  • 200g de galletas digestive
  • 100g de mantequilla
  • 500g de queso crema
  • 200g de nata líquida
  • 100g de azúcar
  • 10g de gelatina en polvo
  • 250g de frutos rojos (fresas, frambuesas, arándanos, etc.)
  • Hojas de menta fresca (opcional)
  • Aceite de girasol (para el molde)

Calorías por porción (8 porciones): aproximadamente 450 calorías.

Receta:

  1. Tritura las galletas digestive en un procesador de alimentos o metiéndolas en una bolsa y aplastándolas con un rodillo hasta que queden bien trituradas.
  2. Derrite la mantequilla en el microondas o en un cazo y añade las galletas trituradas. Mezcla bien hasta que queden bien integradas.
  3. Coge un molde desmontable de unos 20-22cm de diámetro y úntalo con aceite de girasol para que no se pegue la base. Vierte la mezcla de galleta y mantequilla en el molde y presiona con los dedos para que quede compacto y uniforme. Mete el molde en la nevera mientras preparas la crema de queso.
  4. En un bol grande, mezcla el queso crema, la nata líquida y el azúcar con una batidora eléctrica hasta que quede una mezcla homogénea y sin grumos.
  5. Añade la gelatina en polvo a 2 cucharadas de agua caliente y mezcla bien hasta que se disuelva. Añade la gelatina disuelta a la mezcla de queso y nata y vuelve a batir hasta que esté todo bien integrado.
  6. Saca el molde de la nevera y vierte la mezcla de queso y nata encima de la base de galleta. Alisa la superficie con una espátula y mete de nuevo en la nevera durante al menos 3 horas o hasta que esté completamente cuajada.
  7. Antes de servir, lava los frutos rojos y corta las fresas en trozos pequeños si lo prefieres. Coloca los frutos rojos por encima de la tarta y adorna con hojas de menta fresca si lo deseas.

Tritura las galletas digestive en un procesador de alimentos o metiéndolas en una bolsa y aplastándolas con un rodillo hasta que queden bien trituradas.

Derrite la mantequilla en el microondas o en un cazo y añade las galletas trituradas. Mezcla bien hasta que queden bien integradas.

Coge un molde desmontable de unos 20-22cm de diámetro y úntalo con aceite de girasol para que no se pegue la base. Vierte la mezcla de galleta y mantequilla en el molde y presiona con los dedos para que quede compacto y uniforme. Mete el molde en la nevera mientras preparas la crema de queso.

En un bol grande, mezcla el queso crema, la nata líquida y el azúcar con una batidora eléctrica hasta que quede una mezcla homogénea y sin grumos.

Añade la gelatina en polvo a 2 cucharadas de agua caliente y mezcla bien hasta que se disuelva. Añade la gelatina disuelta a la mezcla de queso y nata y vuelve a batir hasta que esté todo bien integrado.

Saca el molde de la nevera y vierte la mezcla de queso y nata encima de la base de galleta. Alisa la superficie con una espátula y mete de nuevo en la nevera durante al menos 3 horas o hasta que esté completamente cuajada.

Antes de servir, lava los frutos rojos y corta las fresas en trozos pequeños si lo prefieres. Coloca los frutos rojos por encima de la tarta y adorna con hojas de menta fresca si lo deseas.

¡Ya tienes lista tu deliciosa tarta de queso y frutos rojos sin horno! Sirve y disfruta con tus seres queridos.

Animo a todos a probar a hacer esta receta tan sencilla y deliciosa. ¡Seguro que os encantará!

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